Inevitablemente, nuestro país tiene que soportar temperaturas muy altas en verano, que en ocasiones pueden superar los 40 grados. Es una época con muchos desplazamientos por carretera y las olas de calor no solo afectan a los que vamos al volante, si no que además influyen en la mecánica de nuestro coche. Desde Talleres Bonachera te queremos dar unos prácticos consejos para que puedas actuar en estas situaciones de calor extremo.
Revisa todos los niveles: Como en cualquier viaje, mirar los niveles del coche es vital para evitar sustos. Dedica especial atención al aceite y al líquido refrigerante para mantener bajo control la temperatura del motor. Pero, además, no olvides revisar el líquido de dirección, el líquido de frenos y el del limpiaparabrisas.
Aire acondicionado: ¿Qué decir del aire acondicionado ante una ola de calor? Simplemente que es un elemento básico para afrontar las altas temperaturas en cualquier tipo de desplazamiento, ya se corto o largo.
Para usarlo en óptimas condiciones, comprueba que enfría adecuadamente y no olvides sustituir o limpiar el filtro del habitáculo para evitar alergias o pérdida de potencia de enfriamiento. Y un pequeño consejo: apaga siempre el aire acondicionado y luego el motor. Hacerlo al revés puede provocar una parada brusca en el compresor, lo que a la larga puede generar averías.
Los neumáticos y los frenos: Los neumáticos sufren mucho en verano y aún más en los viajes. Las altas temperaturas hacen que deban aguantar más peso y por ello es muy importante que mantengas la presión adecuada o compruebes que no hay abolladuras, cortes o defectos en ellos que puedan provocar un reventón.
En cuanto a los frenos, siempre deben estar en buen estado antes de viajar, pero además, si vas a conducir bajando un puerto de montaña con curvas debes revisarlos detenidamente para evitar el efecto “fading” o de fatiga en los frenos