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En verano aumenta el número de desplazamientos a diferentes destinos, así como los conductores inexpertos, despistes y fatigas que influyen de forma notable las posibilidades de tener un accidente y es por eso que en verano se concentra el mayor número de accidentes de tráficos. En Motor DYE os mencionamos causas y conductas, no reglados, que se encuentran detrás de muchos accidentes de tráfico.
Datos oficiales en los últimos diez años reflejan que durante los meses de junio a septiembre un registro de 9.251 personas fallecidas en accidentes de tráfico, 444.783 heridos y 45.000 sufren secuelas permanentes. Estos son los factores o causas que debemos tener en cuenta además de las medidas de seguridad reguladas como el uso del cinturón de seguridad, evitar la velocidad, el consumo de alcohol, drogas o el móvil.
- Los viajes en grupo: los desplazamientos en familia y con amigos en varios coches es frecuente en estas fechas y también las conductas inapropiadas frente al volante aumentan como adelantamientos precipitados para intentar ir lo más juntos posible. Es posible circular a un ritmo similar pero no existe la necesidad de ir todos juntos constantemente.
- Horario Vs. Kilómetros: un error muy frecuente es medir los trayectos en tiempo y no en kilómetros. Poner una hora fija de llegada a un destino pone en riesgo que muchos conductores aumenten la velocidad e intenten realizar adelantamientos más arriesgados para llegar a la hora determinada.
- Los últimos kilómetros del trayecto: muchas veces se comienza el viaje con fatiga y en el trayecto se van acumulando el aplazamiento de necesidades fisiológicas hasta llegar al destino. Esto aumenta el estrés y precipita las conductas de riesgo. Los últimos kilómetros son especialmente los más peligrosos.
- Alerta a las fatigas: hay un estudio realizado a 200 conductores a los que se le pusieron electrodos para medir su actividad cerebral mientras conducían, se descubrieron varios detalles: como que un conductor fatigado duplica el número de distracciones, aumenta su tiempo de reacción, comete más errores y mira los retrovisores y señales de tráfico cuatro veces menos que un conductor descansado.
- Hora de mayor peligro de accidente: evita conducir entre las dos y las cuatro de la tarde o durante la noche. Los accidentes nocturnos suelen ser más graves que los diurnos, ya que se pierde el 70% de visibilidad y comienza a aparecer el sueño. Además, el rescate en caso de siniestro, es más complicado.
- Objetos peligrosos: llevar el asiento con un respaldo de bolitas, un cojín o una toalla puede ser mortal. Estos elementos favorecen el denominado ¨efecto submarino¨, el conductor o pasajero pierde el apoyo con el asiento, deslizándose bajo el cinturón y estrellándose contra el salpicadero o el espacio de los pedales, obteniendo como resultado graves lesiones de espalda, pelvis, fémur y heridas internas de gravedad.
*Tampoco se debe llevar la ventanilla del coche a medio abrir, en caso de accidente, el cristal puede convertirse en una guillotina mortal. - El peligro de los atascos: todos sabemos el estrés que generan los atascos en los conductores, alterando la atención y se potencia la agresividad. El mayor riesgo se produce cuando se acaba la retención, cuando la velocidad se dispara porque los conductores quieren recuperar el tiempo perdido.
- Ponerse el cinturón en marcha: ha sido comprobado que una de las causas más frecuentes de accidentes de tráfico, inexplicables por distracción y pérdida de control del vehículo, es ponerse el cinturón en marcha o intentarlo precipitadamente cuando vemos a la Guardia Civil o la Policía.
- Discutir al volante: las discusiones alteran la atención, incrementan el estrés y la agresividad, aumentando el tiempo de reacción y disminuye la percepción del entorno en más de un 50% duplicando las posibilidades de sufrir una accidente.
- Atención al coche precedente: las retenciones son frecuentes en las salidas vacacionales, y da lugar a alcances en cadena que en ocasiones pueden ser muy graves si no se lleva correctamente el reposacabezas. Un golpe a 50 km/h ejerce una fuerza sobre nuestro cuello de 180 a 300 kg.
El ”efecto mirón” ante un accidente o avería suele ser otro desencadenante de alcances. También los frenazos, de los vehículos que nos preceden, al ver un radar o una patrulla de la Guardia Civil es un gran factor de riesgo. El único modo de evitar estos accidentes es mantener una correcta distancia de seguridad. - Conductores ocasionales: aproximadamente sólo el 53% de los conductores utilizan el coche a diario y un 41% los que conducen de forma ocasional. Estos conductores tienen un 40% más de posibilidades de tener un accidente, especialmente durante este periodo estival, debido a la falta de costumbre en el uso del coche y por su poca práctica en las situaciones de riesgo habituales del tráfico.
Toma en cuenta estas causas y conductas que afectan los trayectos en carretera y evita los accidentes. En Motor DYE os deseamos que disfrutéis de vuestras vacaciones de verano con tranquilidad y seguridad. Recuerda traer tu coche al taller para dejarlo a punto, pide tu cita taller.
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